La posible demolición del Homestead Shopping Center, hogar de uno de los pocos supermercados coreanos y tiendas tradicionales chinas de la ciudad, amenaza con borrar años de esfuerzo, cultura y comunidad. Decenas de familias trabajadoras temen perder su sustento si avanza el plan de construir 147 viviendas en el lugar.

El Homestead Shopping Center, en el 3521 de Homestead Road, ha sido durante más de una década un punto de encuentro para la diversa comunidad asiática de Santa Clara. Allí, entre los aromas del té herbal, los sabores de la cocina china e india y los saludos en varios idiomas, se teje cada día una historia de trabajo, cultura y perseverancia. Pero esa historia está en peligro de desaparecer.

La desarrolladora PulteGroup, con sede en Georgia, ha presentado un ambicioso plan para reemplazar el centro comercial con 147 viviendas adosadas, de las cuales unas 20 serían asequibles, además de 5,000 pies cuadrados de nuevo espacio comercial. El proyecto, sin embargo, implica la demolición de más de 10 negocios locales, entre ellos el Super Kyo-Po Plaza, Fuheng Herbs y JX Cuisine, un restaurante chino que lleva más de diez años sirviendo a vecinos y visitantes.

“Este lugar es el corazón de Santa Clara”, expresó con emoción Dalong Zhang, dueño de Fuheng Herbs. “Si lo cambian por viviendas, perderemos el corazón y moriremos lentamente”. Zhang encabeza una petición ciudadana para detener la demolición, argumentando que el impacto no solo recaerá sobre los pequeños empresarios, sino sobre cientos de empleados y clientes que viajan desde distintos puntos del condado para acceder a productos tradicionales difíciles de encontrar en otros lugares.

Para los comerciantes, el anuncio de desalojo fue un golpe repentino. Recibieron la notificación en febrero pasado, con menos de un año para abandonar sus locales. Muchos aún no saben adónde ir ni cómo costear una mudanza. “Si cierran aquí para construir casas, ¿quién podrá comprarlas?”, cuestiona Ling Ling Yang, dueña del restaurante JX Cuisine. “Nosotros apenas sobrevivimos, y nuestros empleados dependen de este trabajo”.

El concejal del Distrito 5, Suds Jain, se reunió con los comerciantes esta semana para escuchar sus preocupaciones. Reconoció que el panorama es complejo, ya que las leyes estatales han reducido la capacidad de los gobiernos locales para frenar proyectos residenciales. “El Estado ha dejado claro que la prioridad es la vivienda”, señaló Jain. “Pero esta decisión afectará profundamente a trabajadores, familias y a toda una comunidad que ha hecho de este lugar su hogar”.

Santa Clara enfrenta la presión de construir más de 11,000 viviendas nuevas antes de 2031, conforme a las metas impuestas por el Estado. Esto ha incentivado a las constructoras a buscar terrenos ocupados por centros comerciales tradicionales para transformarlos en zonas residenciales. Otro ejemplo es el Moonlite Shopping Center, que la firma Toll Brothers planea convertir en un complejo de condominios y casas adosadas.

Aun así, Zhang y sus colegas no piensan rendirse. “¿Quién cuida de los pequeños negocios?”, se pregunta. “Es la primera vez que un concejal se acerca a escucharnos. Pero necesitamos más que palabras”. El empresario confirmó que asistirá al foro comunitario del 13 de noviembre, donde PulteGroup presentará su proyecto ante los vecinos.

Lo que está en juego no es solo un grupo de tiendas, sino un símbolo de identidad. En una ciudad donde más del 40% de los habitantes son asiático-estadounidenses, el Homestead Shopping Center representa mucho más que un centro comercial: es un espacio de pertenencia, memoria y comunidad.

Si se pierde, Santa Clara no solo verá desaparecer un conjunto de locales, perderá parte de su alma multicultural.